lunes, 17 de agosto de 2009

Coincidencias termométricas

Foto finish, AFP, http://www.marca.com/albumes/2009/08/16/bolt/index_4.html¿Qué tienen en común los velocistas Usain Bolt y Tyson Gay? Además de ser los hombres más rápidos del planeta al día de hoy, provienen de los dos únicos países en los que la escala Fahrenheit es utilizada de forma habitual por sus ciudadanos: Jamaica y Estados Unidos. El récord impuesto por el jamaicano Bolt (¡9,58 segundos!) es de infarto.

Fotografía
Récord del mundo de Bolt - Foto finish, Foto AFP, http://www.marca.com/albumes/2009/08/16/bolt/index_4.html

Celsius

Como ya vimos con Fahrenheit, la evolución del termómetro y las escalas de temperatura fueron fruto de la habilidad, el ingenio, y en última instancia del sentido práctico de sus descubridores. La escala Celsius es buen ejemplo de ello.

Anders Celsius (1701-1744) descendía de una familia de científicos y él mismo era un reconocido astrónomo en Suecia. Durante el curso de sus investigaciones, decidió que la escala Fahrenheit podía serle más útil si ésta fuera centesimal, y fue así que en 1742 inventó la escala centígrada, de 0 a 100 grados. Sólo que designó al punto de ebullición del agua como cero (212° F) y al punto de fusión o congelación del agua como 100° (32° F). Es decir, al revés de lo que la conocemos ahora.

Aunque nos parezca algo ilógico, para Celsius su escala tenía mucho sentido. Sus mediciones se limitaban mayormente a condiciones del tiempo, y con su nueva escala podía obtener sólo valores positivos de temperatura. Al parecer los valores negativos no eran muy populares en esos tiempos.

Como con Fahrenheit, la modificación de la escala diseñada por Celsius tuvo lugar después de su muerte, ocurrida por tuberculosis a los 42 años. Fue el afamado botánico sueco Carl Linnaeus (1707-1778), colega de Celsius en la Universidad de Uppsala, quien invirtió la escala. En 1745, Linnaeus se encontraba enfrascado en la restauración del Jardín Botánico de la universidad, cuando advirtió la utilidad de registrar los datos de temperatura de los invernaderos. Fue así que en Diciembre de 1745 aparece por primera vez publicado, como pie de página en un artículo, la descripción de la nueva escala: "... nuestros termómetros muestran 0 en el punto en que el agua se congela y 100 grados a la temperatura de ebullición del agua". Nuevamente, el sentido práctico primaba, para Linnaeus las condiciones biológicas que él medía se reflejaban mejor en esta nueva escala. No le preocupaban los valores negativos de temperatura puesto que las plantas no sobreviven a valores menores de 0° C.

Referencias

Fahrenheit

Conversión al sistema métrico en Australia (1973)- Temperatura, http://lamar.colostate.edu/~hillger/postage.htm
La propiedad de dilatación y contracción de muchos líquidos al ser expuestos al calor y al frío fue utilizada ya desde finales del s. XVI en la fabricación de termómetros. Agua, vino, mercurio o aceite de linaza eran los más usados. Pero estos primeros termómetros tenían poca utilidad por su escasa precisión, en parte debido a que se desconocía cómo se expandían los fluidos, a la baja calidad de las columnas de vidrio que se fabricaban en ese entonces, pero sobretodo a la falta de una escala que permitiera cuantificar las variaciones de temperatura de manera reproducible. Fue en 1714 cuando ocurrió el gran cambio con la invención del termómetro de mercurio por Fahrenheit.

Daniel Gabriel Fahrenheit (1686-1736), nacido en lo que hoy es Gdansk, fue de profesión comerciante, pero de vocación hombre de ciencias. Su interés por las ciencias naturales lo llevó durante uno de sus viajes (1708) a visitar al astrónomo danés Olaf Rømer, quien años antes había desarrollado una escala termométrica propia que le permitiera ajustar sus mediciones astronómicas para que no difieran con el paso del verano al invierno.

Conocedor de la importancia de contar con instrumentos científicos de gran precisión, Fahrenheit se dedicó a su fabricación una vez establecido en Amsterdam. Su habilidad como soplador de vidrio le permitió construir finas columnas de vidrio de gran regularidad que permitían una mejor graduación. Experimentó primero con agua en sus termómetros, luego en 1709 con alcohol (Rømer empleaba vino mezclado con azafrán), para luego decantarse en 1714 por mercurio, que a diferencia del alcohol podía obtenerse en un alto estado de pureza y tenía un coeficiente de expansión casi lineal. Finalmente, basó su escala de temperaturas en la utilizada por Rømer, que hacía uso de 3 puntos de referencia: cero grados, correspondiente a la temperatura más fría conocida en ese entonces (que Fahrenheit asignó a la que se obtenía al mezclar hielo y agua con sal común); la temperatura de congelación del agua; y, la temperatura corporal como el punto de calibración más alto. Modificó la escala original de Rømer ampliándola (la temperatura corporal pasó de ser 22,5 grados Rømer a 96 grados Fahrenheit), para obtener valores enteros de temperatura, de tal manera que establecía 180° entre la temperatura de fusión y la de ebullición del agua (32° y 212° F). Pulió su escala de temperaturas una y otra vez para hacerla más precisa, hasta convertir su termómetro de mercurio en el primer termómetro comercial de gran aceptación. Aunque la mayor demanda era para observaciones del tiempo (0-96°), Fahrenheit llegó a construir termómetros que llegaban a medir 600°, temperatura a la que ebullía el mercurio en sus termómetros. Su curiosidad lo llevó a comprobar el hecho ya conocido entonces de que el agua hervía a una temperatura fija, por más calor que se le aplicara, para luego descubrir por su cuenta que líquidos puros poseían p.eb. determinados. Dio clases de química en Amsterdam, y en 1724 fue nombrado miembro de la Royal Society, con la que publicó muchos de sus hallazgos.

Aunque muy buena para la época, la escala Fahrenheit no era del todo precisa, su problema radicaba en la elección de sus referencias. Saltan las sospechas cuando describe que el valor cero de su escala, "la mezcla de hielo, agua y cloruro de amonio o inclusive agua de mar", "se obtiene mejor en invierno que en verano"; y que el tercer punto de la escala (96°) se obtenía "al sostener el termómetro en la boca o bajo la axila de un hombre vivo en buena salud ...". El cambio de referencias por las más consistentes temperaturas de fusión y ebullición del agua, y la eliminación del tercer punto de calibración en la escala, solucionó el problema, aunque Fahrenheit no vivió para ver estos cambios.

Referencias


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